La popularidad del piercing en la lengua no se acaba, veamos lo que dice un dentista. No tener un cuidado adecuado del piercing y una mala higiene bucal puede terminar en un desastre.
Piercings en la lengua descrito por un dentista
Cuando alguien llega a nuestra clínica con un piercing en la lengua, consideramos bien que efectos ha tenido este artículo en la salud bucal. No importa si la perforación se ha hecho en la lengua, labios y boca, siempre habrá riesgos; y muchas veces los efectos no se notan hasta cuando están bastante avanzados.
Uno de los problemas a los que se enfrenta una persona que se ha puesto un piercing en la lengua, es la recesión gingival y la retracción de las encías. Esto a su vez, trae como consecuencia infecciones y traumatismos en la boca. Hemos visto al menos una de cada cinco personas que tienen piercing en la boca, sufren complicaciones debidos a su uso.
Por supuesto, no está prohibido usar un piercing en la lengua. Más bien, los dentistas recomendamos que quien decida llevar uno debe estar consciente de que necesita extremar su higiene. Además, acudir al dentista más seguido para hacer una revisión del estado de salud de toda su boca.
¿Cómo se hace un piercing en la lengua?
La zona donde se coloca con más frecuencia un piercing es el centro de la lengua. Bien puede ser un aro o un labrette, es decir, una barra que en cada extremo tiene una esfera de seguridad.
Es necesario que el que portará el piercing se haga un cepillado dental profundo, antes de comenzar con el procedimiento. Asimismo, debe lavarse las manos quien realizará la perforación, esterilizándolas para posteriormente colocarse guantes de látex nuevos.
Para colocar un piercing en la lengua se hace una perforación en la zona. No obstante, primero se debe hacer una marca por donde entrará y saldrá la aguja, prestando mucha atención a la posición de las venas, de manera que no se desgarren los vasos sanguíneos y en consecuencia, se produzca una hemorragia.
Se trata de un procedimiento quirúrgico menor que se hace con ayuda de una aguja especial para perforar, que previamente debe ser esterilizada, al igual que la joya que se instalará en la lengua. El dolor de la perforación es inevitable, pero como se hace rápido no pasará mucho tiempo para que dejes de sufrir por esto.
Después de colocar la joya, y asegurarla bien, es imperativo limpiar la boca y lavarla con enjuague bucal, además de seguir con las recomendaciones de higiene del experto para evitar infección. Colocar hielo y tomar analgésico te ayudará con la inflamación y el dolor de la herida.
Tipos de piercings en la lengua
Los tipos de piercings dependen de la posición y la joya que se colocará en la lengua. Por ejemplo:
- Piercing tradicional: Es aquel que se coloca en la parte central de la lengua, y por lo general, es una barra con esferas en sus extremos. Quizás el más recomendable por su lejanía con los dientes.
- Piercing en la punta de la lengua: No es tan común, pero este se coloca a medio centímetro de la punta de la lengua. Como esta zona es muy sensible, supone más dificultad para cicatrizar. Además de la esfera, se puede colocar un aro. Sin embargo, hay que tener en cuenta que este tiene más riesgos de chocar o engancharse con los dientes, o bien que puedas morder la joya, ocasionando desgaste de tus piezas dentales.
- Piercing Venom, o Viper, que son dos perforaciones paralelas en todo el medio de la lengua. Con estos, hay que tener mucho cuidado de no perforar una vena o un nervio.
- Piercing Suface, que se usa atravesando la lengua de un lado a otro. Sin embargo, no va de extremo a extremo, como en horizontal.
- Piercing en el frenillo o marly, cuya joya se coloca en el frenillo de la lengua. Uno de los más delicados, pues se puede perforar el tejido del maxilar inferior.
¿Qué cuidados precisa un piercing en la lengua?
Tal cual una ortodoncia, el piercing en la lengua es un cuerpo extraño. Así que la mucosa se enfrenta a una proliferación de bacterias que ocasionan infecciones o enfermedades en la zona bucodental. Entre los cuidados que debes considerar si tienes un piercing en la lengua o quieres colocarte uno, son los siguientes:
- Acudir a consulta con el dentista para hacer revisión del estado de salud de la boca. Haciéndolo así, se detectan oportunamente síntomas de infección como inflamación o enrojecimiento de la zona.
- Mantener el área limpia, así como la joya que se coloca. Después de cada comida, usar enjuague bucal para evitar infección.
- Cepillarse los dientes por lo menos dos veces al día, aunque lo más recomendable es que sea después de cada comida.
- No chasquear el piercing con los dientes, tampoco tensionarlo.
- Tener cuidado de no mover mucho el piercing cuando hablas o masticas.
- Comprobar, con las manos limpiar, si el piercing está bien ajustado. De lo contrario, se corre el riesgo de tragarlo.
- Quitar la joya si se va a hacer ejercicio y usar protector bucal.
¿Qué consecuencias dentales tiene un piercing en la lengua?
Sobre todo si es un piercing en la lengua, es necesario considerar las consecuencias que este puede tener para con nuestra salud dental. No pedir ayuda a tiempo, puede llevar incluso a la pérdida del gusto, la capacidad de hablar, así como la aparición de deformidades que causen dolor al paciente.
Algunas consecuencias de ponerse un piercing en la lengua son:
- Retracción de encías, haciendo que se descubra más superficie de la mucosa. Además, esto trae a su vez, pérdida de resistencia de los dientes y se corre el riesgo de movilidad o pérdida de los mismos. Este riesgo aumenta más si el portador es fumador.
- Traumatismos o lesiones por el desgaste dental debido al rozamiento con el piercing. También es posible que se astillen o fracturen los dientes.
- Enfermedades periodontales por la propagación de bacterias y formación de sarro, sobre todo, en los dientes inferiores.
- Mal aliento a razón de placa bacteriana.
- Hemorragia en lengua, encías o labios.
- Dolor e inflamación, síntomas que indicarían presencia de infección.
- Pérdida del gusto.
- Dificultad para una buena pronunciación.
- Ingesta del metal.