Respirar por la boca es un problema común que puede afectar tanto a adultos como a niños. De hecho, muchas personas lo hacen de forma habitual, ya sea por mala costumbre o inconscientemente. Parece una acción inofensiva, pero es importante tener en cuenta que esta forma de respiración puede tener un impacto significativo (y no precisamente positivo) en la salud dental, la cual es fundamental para el bienestar general ya que afecta la capacidad para comer, hablar y sonreír con confianza.
Existe un vínculo directo entre la manera de respirar y el desarrollo de la dentadura, aunque no parezca haber relación alguna. Esto vuelve necesario que las personas tengan conocimiento sobre cómo respirar por la boca puede afectar su salud dental y qué medidas se deben tomar para mantenerla en buen estado, incluso si no es posible evitar respirar por la boca.
La respiración bucal puede ser causada por varios factores que incluyen problemas nasales, alergias, bloqueo de las vías respiratorias y hábitos orales. En el caso de problemas nasales, la obstrucción o congestión nasal dificulta la respiración a través de la nariz, lo que lleva a que la persona respire por la boca regularmente. Las alergias también pueden provocar congestión nasal crónica, condición que obliga a respirar por la boca para obtener el oxígeno necesario. Además, es posible que haya bloqueo en las vías respiratorias debido a desviaciones del tabique nasal, pólipos nasales u otras obstrucciones físicas.
Todas estas causas tienen un impacto negativo en los dientes y la cavidad oral. La respiración bucal constante puede llevar a la sequedad de la boca, que disminuye la producción de saliva y aumenta el riesgo de caries y enfermedades en las encías. La falta de saliva también dificulta la eliminación de bacterias y restos de alimentos, y esto favorece la acumulación de placa y la formación de cálculos dentales. Adicionalmente, la respiración por la boca suele alterar la posición de los dientes y el desarrollo de la mandíbula, lo que desarrolla problemas de mordida y maloclusión dental. Sin embargo, a pesar de ser muchos los problemas ocasionados por respirar por la boca, también se pueden corregir o minimizar sus perjudiciales efectos.
Principalmente, se debe tratar de controlar este mal hábito. Se pueden practicar ejercicios de respiración nasal, así como buscar ayuda de un especialista en otorrinolaringología en caso de existir dificultades respiratorias por la nariz. Como respirar por la boca disminuye la producción de saliva, es importante mantenerse hidratado bebiendo suficiente agua a lo largo del día para evitar la sequedad bucal, y por lo tanto el mal aliento y la aparición de caries. Por supuesto, para garantizar una buena salud dental, es fundamental acudir regularmente al dentista, el cual podrá evaluar los problemas relacionados con la respiración bucal y proporcionar el tratamiento que sea necesario.
El equipo de la Clínica Dental José Luis Cano, ubicada en Murcia, realiza con la tecnología más avanzada todos aquellos procedimientos aplicados cuando los efectos de respirar por la boca ya son demasiado notorios. El más popular es la ortodoncia (con brackets o alineadores invisibles), que corrige alteraciones del desarrollo, restableciendo así el equilibrio morfológico y funcional tanto bucal como facial, mejorando también la estética de ambas estructuras.
También se lleva cabo con frecuencia implantes y extracciones dentales, ya que carecer o tener de sobra uno o más dientes puede ser la causa de una respiración inadecuada. Pero sin duda alguna la técnica más novedosa de la Clínica Dental José Luis Cano es el Método OIA, que ejecuta un diagnóstico integral que analiza e identifica diferentes patologías orales provocadas por enfermedades sistémicas como el asma, entre otras.
Gracias a dicho estudio, los capacitados profesionales que constituyen esta institución elaboran planes de tratamiento individualizado teniendo en cuenta el estado de salud general y la capacidad masticatoria de cada paciente. Y lo que es más importante, pueden anticipar cualquier patología en fase inicial que se esté desarrollando y tomar medidas de prevención. Esto viene de maravilla porque en lo que a la salud dental se refiere, siempre es mejor prevenir que lamentar.
Nadie debe permitir que la respiración oral afecte su sonrisa y su calidad de vida. Si existen daños causados por este hábito, enseguida hay que agendar una cita con un odontólogo de confianza y toma medidas para revertirlos. La salud dental es importante y todos merecen disfrutar de una boca sana y hermosa.